ENSEÑANZA. ADVERTENCIA. Bejukotai

 

ENSEÑANZA, ADVERTENCIA

                            Amanda Adriana Arimayn. Arquitecta

Arieh Sztokman, Rabino

 

En este Shabat, 13 de mayo de 2023 del calendario gregoriano, 22 del mes de Iyar de 5783 del calendario hebreo, leeremos en la Torá las parshiot Behar (en el monte) y Bejukotai (en mis leyes) Levítico 25:1 – 27:34) y así finalizamos la lectura del libro de Levítico.

“Si en Mis fueros os vais a encaminar, y Mis mandatos vais a guardar y los vais a cumplir, Yo daré vuestras lluvias en su tiempo y dará la tierra su producto y el árbol del campo dará su fruto” (Levítico 26:3/4)

“Y si Mis fueros vais a despreciar y Mis leyes vais a repudiar, para no cumplir todos Mis preceptos, para abolir Mi pacto. También Yo os hare esto a vosotros; y mandaré sobre vosotros pánico, … Y sembrareis en vano vuestra siembra, y la comerán vuestros enemigos”. (Levítico 26:15/16)

Estas son enseñanzas, advertencias que Dios hace al pueblo.

Se parece mucho a lo que nos decían cuando éramos mas pequeños, “si te portas bien te daré un chocolate”; “si no me haces caso no te daré postre”, eran palabras que expresaban nuestros padres para educarnos con sus valores y a su manera.

Dios no nos castiga, nos enseña como un padre enseña a sus hijos.

Entendemos que Dios nos viene enseñando como debemos vivir, es decir cumplir las leyes que nos fueron dictadas.

Al mismo tiempo nos ha regalado el libre albedrio para hacer lo que entendemos correcto cumpliendo las leyes.

Al mismo tiempo debemos decir que Dios, cada día, nos da la vida que es el bien más preciado.

En esta parashá (sección) hay una palabra “si” que es condicional, es decir que el ser humano tiene la posibilidad, en virtud de su libre albedrio, de cumplir o no, con las enseñanzas de Dios y responsabilizarse de las consecuencias de sus acciones.

En virtud de lo que el ser humano haga recibirá el resultado pertinente. Todas las acciones humanas generan una consecuencia.

El objetivo de Dios es que el ser humano aprenda a hacer lo que es bueno a Sus ojos en lugar de hacer lo “que les parecía bien” (Jueces 21:25).

Además, la idea de Dios es que, si el ser humano se equivoca y se aleja de Dios, pues entonces que se detenga y retorne a Su encuentro.

Su objetivo es que repare su error y siga viviendo con el otro y con Dios.

Los seres humanos hemos ido creando, a lo largo de los años, un mundo con muchas diferencias, hemos generado guerras que produjeron muchas muertes, es decir lo opuesto a la voluntad de Dios.

Pareciera que no hemos aprendido lo que Dios no ha enseñado y nos sigue enseñando.

Repitiendo palabras de Martin Luther King quien dijo: “los seres humanos hemos aprendido a volar como los pájaros, a nadar como los peces, pero no hemos aprendido la tarea de vivir como humanos entre hermanos”.

Entendemos que debemos detener nuestro correr a ninguna parte, dado que al único lugar donde debiéramos llegar es a nosotros mismos.

Repitiendo palabras del Rabino Jonathan Sacks (Z”L) “hemos perdido el rumbo”.

Reunámonos de corazón a corazón, no solo para las fotos, y aprendamos los unos de los otros, tenemos textos maravillosos a saber: Tanaj (Biblia hebrea); Nuevo Testamento; Corán y seguramente muchos más que desconocemos.

Somos nosotros, los que podremos, si queremos, cambiar la situación negativa que vivimos.

No serán el Profeta Elías, Jesús y/o Muhammad, ni tampoco será el otro.

Nos hablan de inteligencia artificial (IA), entendemos que los robots harán muchas tareas que antes hacían los seres humanos, pero no creemos que, por ahora, sepan hacer paz, por lo tanto, nuevamente somos nosotros los seres humanos de carne y hueso los que seremos capaces, si aprendemos, a corregir los errores que hemos cometido.

Demos el ejemplo: ¿Preguntemos a nuestros hijos qué quieren lograr ellos en sus vidas?

Enseñemos la importancia de vivir con respeto, honestidad, humildad, es decir con valores positivos.
Además, seamos capaces, todos los días, de agradecer a Dios por todo lo que nos regala.